Mythica The Darkspore: El desprecio por la fantasía

Por: G.J.Jiménez-
@superrockman

"¿Quién escribió esto?" fue lo que dijo el director y guionista, Kevin Smith, al leer el guión de Superman Reborn de Jonathan Lemkin, según cuenta en sus giras. Eso mismo me pregunté cuando me topé, por ocio, con una película de dos estrellas en imbd: Mythica The Darkspore. 

El film resultó ser la continuación de Mythica A Quest for Heores, cuyas críticas no hablan mejor de ella. Al parecer, Anne K. Black y su equipo son una especie de geeks que decidieron hacer cine y llevan a la pantalla, de forma independiente, la poco innovadora historia de Marek (Melanie Stone), una maga que oculta un poder oscuro en su interior: la nigromancia. Marek viajará en la búsqueda del Darkspore antes que Szorlok se les adelante y así evitar que este libere un terrible poder. En su viaje, la acompañarán una clérigo pelirroja llamada Teela (Nicola Posener); un semielfo, aparentemente un bardo, llamado Dagen (Jake Stormoen), que funcionará como el personaje de la discordia;  el guerrero humano, Thane, recordándome al personaje de Mass Effect —solo por el nombre—; y Qole (Rocky Myer), un elfo fornido —si, fornido— con tatuajes en la piel y con un trasfondo que intenta ser trasfondo. Fuera de ellos, aparecerá brevemente el tutor de Marek, Gojun Pye, interpretado por el, tal vez, olvidado—o recordado—, Kevin Sorbo, quien en los 90 fue el protagonista de la serie, Hercules, pero apenas tendrá un momento dentro de los más de 90 minutos de película. 


Si se busca sobre el tema, verán como tratan de justifica la película por su origen de bajo presupuesto, pero ¿qué ocurre con los realizadores? El uso de efectos especiales pobres para la magia, el diseño de un dragón que deja mucho que desear, una historia que raya en lo trivial, hace pensar en cómo llegó esto a ser rodado. Si se carece de recursos, lo ideal es adaptarse a ello, se podría lograr una historia donde se aprovechen otros aspectos de los  RPG, una magia menos visible, logrando una apariencia más creíble. La fantasía es una invitación a soñar en mundos mágicos, si el espectador no logra soñar, entonces el fin se verá comprometido.

Aunque al inicio me refiera a ellos como unos fans de los RPG que decidieron hacer cine—y probablemente lo sean—, Anne K. Black lleva varios proyectos similares, entre ellos la historia de Age of the Dragons(2011), mas es importante tomar en cuenta el objeto de mi preocupación, la mayoría de las películas que utilizan elementos de D&D, han sido muy pobres en producción. Es obvio que todos los días no aparece una película como The Lord of the Rings, pero eso no impide hacer un film equilibrado, con personajes bien desarrollados, un guión con una estructura clara, y con una representación de la magia que no derribe los sueños del espectador.

Para aquellos que quieren sentir, aunque sea levemente, sus aventuras roleras en pantalla, podrán encontrar unos minutos de quest, undead, orcos y dragones acechando a los aventureros en Mythica The Darkspore.  Lamentablemente no será la campaña épica ideal, pero quién sabe, tal vez Anne K. Black llegue a mucho más. Ya está en postproducción la tercera entrega, Mythica: The Necromancer.