Norlando Zapata- 

Desde hacia tiempo me parecía que nada de Marvel Studios valía demasiado la pena, en especial la gran decepción que representó para mi Avengers: Age of Ultron. A nivel de televisión, intenté seguir Agents of S.H.I.E.L.D., la cual no me agradó en absoluto y abandoné a los pocos capítulos. Sin embargo, para el 2015, lanzaron por Netflix la adaptación Daredevil, la cual empecé a disfrutar desde el mismo día del estreno. 

Esta nueva encarnación de Daredevil me tenía bastante emocionado desde que empecé a ver las fotografías del rodaje en la web. Con Drew Goddard (Cabin in the Woods, Cloverfield) y Steven DeKnight (showrunner de Spartacus) al mando ¿qué podía salir mal? Las expectativas eran altas. Prometían mucha acción "realista", violencia y una trama profunda. Además, se basarían en la saga de cómics "El Hombre sin Miedo" de Frank Miller y John Romita Jr., historieta de lectura obligatoria para los fanáticos de Daredevil, donde se cuentan los orígenes de Matt Murdock como el superhéroe de Hell's Kitchen. 

Sin embargo, después de que la crítica destruyera la adaptación al cine de Daredevil en el 2003, que protagonizaba Batman Ben Affleck, es de suponer que Marvel Studios debería tomar las precauciones necesarias para tener éxito con esta adaptación.

Para empezar, el cast es excelente: Charlie Cox como Matt Murdock/Daredevil, Deborah Ann Woll como Karen Page, Elden Henson como Foggy y finalmente, nada más y nada menos que el legendario Vincent D'Onofrio interpretando al archienemigo del héroe, Wilson Fisk, el Kingpin.

"Una película de 13 horas", así catalogó DeKnight a la serie. Afortunadamente, todos los capítulos fueron lanzados el mismo día por Netflix, así que no había espera, podía ver toda la temporada cuando quisiera, las veces que quisiera.

*A partir de aquí habrán algunos spoilers. Si eres de los llorones que no les agradan los spoiler, quizás no quieras leer lo que viene.*

El primer capítulo abre con el accidente que quita al joven Matt su sentido de la vista. La escena logra impactar, empezando con la dosis de drama que no faltará en toda la serie. Luego, un Matt adulto está en un confesionario, donde escuchamos la frase "No busco penitencia por lo que hice, padre. Pido perdón por lo que haré". Un diálogo increíblemente memorable y que a pesar de durar unos cuantos minutos, logra mantener el interés. No hay líneas desperdiciadas.

Luego saltamos a una secuencia nocturna donde gangsters modernos someten a un grupo de mujeres, con fines obviamente no muy agradables. Nuestro héroe invidente no tarda en aparecer, esta vez con su rudimentario traje negro, característico en los cómics del "Hombre sin Miedo". El sigilo y los movimientos al estilo ninja son impresionantes. Al comenzar el enfrentamiento, vemos como Daredevil, valiéndose de sus sentidos desarrollados, apalea brutalmente a los malhechores, liberando a las secuestradas y finalmente, ensañándose en golpear la cara de uno de los tipos que se atrevió a no rendirse. Esta escena establece el tono de la serie para el resto de la temporada. Daredevil va con todo y no muestra piedad por los villanos a los que enfrenta, eso si, sin cometer asesinato.

El primer capítulo también nos presenta de forma efectiva al lado humano del Diablo de Hell's Kitchen. Matt y Foggy, abogados novatos, deben defender a su futura compañera, Karen, la cual está implicada en un asesinato que no cometió y que está ligado a corporaciones criminales. 

Con estos temas, Daredevil se presenta como una serie mucho mas madura que sus contrapartes de DC, como lo son Arrow y Flash. También los antagonistas son mas humanos (en todos los sentidos, nada de villanos muy caricaturescos) y la ultra-violencia estará presente en casi todos los episodios. No obstante, la violencia brutal no es injustificada ni mucho menos demasiado exagerada. Uno que otro hueso roto bastante gráfico y cráneos aplastados sirven de ejemplo, pero no están solamente para impactar al televidente, sino también para establecer el tono donde Matt y su alter-ego se van a desenvolver. Estos elementos no son típicos para los super-héroes en la gran (y no tan gran) pantalla, siendo más bien relacionados con un público familiar. No es así en Daredevil y eso implica un buen riesgo por parte de Marvel Studios, la cual usualmente plaga de humor sus películas.

Hablando de humor, Foggy Nelson se establece rápidamente como el "comic relief" o personaje gracioso del grupo. Muchos se quejaron de como fue ejecutado su personaje con respecto al cómic, sin embargo, su personalidad trae buen balance al tono oscuro y serio de Daredevil. 

En los primeros episodios se muestran varios villanos secundarios, pero no es sino hasta el tercer episodio donde vemos por primera vez a Wilson Fisk (Kingpin). Este va a ser el villano central de la temporada y que, siendo interpretado por el grandioso Vincent D'Onofrio, nos tiene ancioso desde el primer capítulo. Su sorpresiva aparición no decepciona, estableciendo al Kingpin mas que como un gangster y villano terrible, como un ser humano, con sus propias motivaciones y que al igual que Matt Murdock, quiere lo mejor para su ciudad. 

D'Onofrio nos presenta una versión mejorada del villano de Marvel. Logró convertir un villano cliché en un personaje tridimensional y hasta querido. Su relación con su mejor amigo y asistente, Wesley (Toby Leonard Moore), es muy bien desarrollada. No es el típico secuaz oprimido y temeroso de su amo. Ambos actores logran establecer una conexión de afectividad clara en los personajes y que a pesar de ser los grandes villanos, les da una profundidad realista a los personajes.

Kingpin, además, tiene un interés romántico durante la serie, la artista Vanessa (Ayelet Zurer la mamá de Kal-El), la cual conoce en una galería de arte y capítulos después logra enamorar como todo un caballero. Wilson Fisk puede ser un hombre decente, educado, romántico generoso y luego contrastar en la escena siguiente quitándole la cabeza con sus manos a quien se atreva a molestarlo. Eso hace de Kingpin, en mi opinión, el villano más memorable y mejor desarrollado de todo el universo cinemático Marvel. Claro, algunos fanáticos tienen sus dudas con respecto a esto, quejándose del enfoque tan protagónico de Fisk.

Matt no se queda atrás con sus intereses románticos. Claire Temple (Rosario Dawnson), salva a Daredevil de una horrible paliza que casi cobra su vida. Inmediatamente establecen conexión y la química entre ambos personajes es muy buena. Sin embargo, Matt también parece tener cierto interés en Karen Page, relación que probablemente se desarrolle en la segunda temporada.

Algo interesante de Daredevil es que los origenes del héroe no se muestran en un solo episodio. A lo largo de varios flashbacks van apareciendo las vivencias pasadas de Matt Murdock y donde se le da especial protagonismo a Jack Murdock, su padre. También aparecera Stick, el maestro de Matt y que lo enseña a usar su ceguera más bien como una ventaja. Este último personaje es extraído de los cómics y la relación entre ambos es muy parecida al material original.

Y hablando de referencias, Daredevil da a los fanáticos su buena ración de referencia a los cómics, haciendo alusión a personajes como Elektra y mostrando por unos segundos a Stone, (otro personaje del cómic) en una secuencia junto a Stick que parece extraída de las páginas de las historietas.

Obviamente, la serie transcurre en el MCU (Marvel Cinematic Universe), pero la relación que establecen con el universo cinemático es bastante sutil y no choca con la tonalidad de Daredevil. Está al pendiente de las escenas de Ben Urich (Vondie Curtis-Hall) trabajando en la editorial del periódico que no es el Daily Bugle.

Con respecto a la estética, es increíble. La fotografía, los colores, las coreografías, todo está impecablemente diseñado y grabado. Las escenas de pelea son muy movidas pero entendibles al ojo humano y parecen bastante reales, destacándose una secuencia larga en un corredor donde Daredevil se enfrenta a varios tipos y otra pelea con cierto ninja. 

Los que esperaban el traje rojo clásico de Daredevil pueden verse no satisfechos del todo. El traje rojo no aparece sino hasta al final y no es tan parecido al del cómic. Sin embargo, su diseño no se sale del concepto de lo que es Daredevil y además el traje es bastante funcional dentro de la ficción. Hablando de trajes, el famoso saco blanco del Kingpin no hará aparición, pero no es una pérdida dolorosa.

En definitiva, Daredevil es una excelente serie y que deja con ganas de más. Afortunadamente, estamos cerca del estreno de Jessica Jones donde hará debut, además, Luke Cage (vienen los Defender). La segunda temporada del hombre sin miedo está ya en grabación, con apariciones confirmadas de grandes personajes, como Elektra Natchios y el Punisher; se estrenará por Netflix en el 2016. Esperemos que Marvel Studios siga trayéndonos buenas historias para las series.