El cine de terror actual y James Wan parecen estar atados, si el malayo no está como director, está como productor o guionista, pero ahí está, presente cada día más en el género. Hace doce años se hizo famoso por la reconocida película Saw y el personaje que marcará toda la franquicia, Jigsaw. Múltiples títulos como Insidious, The Conjuring, Anabelle, entre otras, aparecerán junto con sus secuelas, transformándose en el símbolo del terror actual.

Lights Out o Cuando las luces se apagan

Una mujer ve algo o alguien cuando apaga la luz... los espectadores tiemblan al saber que algo maligno se acerca. Con este argumento, David F. Sandberg logró que uno de sus cortometrajes se hiciera viral, lo que llamó la atención de James Wan.  El cortometraje participó en el concurso Who's There? del cual salió vencedor, ganando el premio de Mejor Director luego de aterrorizar a los espectadores. El productor, Lawrence Grey, quien también participó en el film, fue quien recomendó el trabajo de Sandberg a  Wan. Lights Out o Cuando las luces se apagan, es la obra prima de este joven director sueco.

Martin (Gabriel Bateman) un niño que vive con su madre no puede más y decide ir por su hermana, Rebecca (Teresa Palmer); su madre parece haber enloquecido y teme que él mismo pueda sufrir de la misma locura. Rebecca al ver que su hermano no está durmiendo, por miedo a que una entidad maligna lo ataque mientras se descuida, toma la iniciativa de confrontar a su madre después de mucho tiempo. Esa decisión la llevará a enfrentar un pasado que había olvidado, teniendo que sacrificar su estabilidad y libertad por su pequeño hermano. Diana (Alicia Vela-Bailey), una especie de espíritu que la atormentaba cuando era niña, ha vuelto y está dispuesta a acabar con todos con tal de quedarse con su amiga, Sophie (María Bello). 

Detrás del telón 

La cinta tiene un buen trabajo fotográfico, llena de escenas macabras e impactantes que harán a más de uno saltar de su asiento. La recreación del espíritu mantiene el ambiente de incertidumbre durante todo el film, no será la película explícita donde veremos litros de sangres y exceso de seres deformes con apariencia perturbadora, la silueta del ente se mantendrá oculta durante casi todo el film, siendo su aparición muy adecuada. La banda sonora resulta bastante acorde, destacando los efectos sonoros y el uso de la panorámica que hará temblar al espectador. El trabajo de Sandberg está muy bien elaborado, cumpliendo con lo requerido de este género.

Algunas debilidades

Sin duda, es una buena película de terror, sin embargo algunos personajes pasarán sin mucha importancia. El más resaltante es el joven con quien sale Rebecca, Bret (Alexander Dipersia) que apareciendo en toda la cinta, pudo fácilmente no existir sin generar mayores cambios.

Otro punto es que hay algunos trasfondos que quedan a la deriva que apenas se asoman, desaparecen, como la del padre de Martin, quien Rebecca nos hará saber que es su padrastro, anunciándose como información de importancia que luego no trascenderá. 

Al parecer han anunciado una posible segunda parte, lo que es común en el productor malayo, quien ha ido redescubriendo el género y sacando provecho de él. No queda claro qué más se puede sacar de este trabajo, pero esperemos que sea lo mejor para impulsar la carrera de David F. Sandberg.