El niño y la bestia - バケモノの子 Bakemono no Ko
Por: Gabriela De Atouguia -
@gbyxd77
Si hay algo que admiro de los japoneses, es su gran habilidad para contar historias con moralejas. No importa lo fantástico o inverosímil que sean, siempre logran su cometido.
Aunque El niño y la bestia (バケモノの子 Bakemono no Ko), se estrenó en el 2015, no fue sino hace unos días que finalmente tuve la oportunidad de verla. Y realmente, mis expectativas no eran muy altas, pues pensé que sería el típico shōnen; pero me alegra afirmar que estaba algo equivocada, pues aunque la película si posee algunos elementos shōnen, va mucho más allá.
¿Qué es la fuerza?
El protagonista de la historia es Ren / Kyûta, un niño que acaba de perder a su madre y que al no saber dónde se encuentra su padre, rechaza vivir con sus demás familiares y, enfadado, se escapa hacia las calles de Shibuya, donde termina entrando en el Reino de las bestias (habitado por animales antropomorfos). En dicho reino, es adoptado como aprendiz por el obstinado Kumatetsu, uno de los sucesores potenciales al trono.
Así, vamos viendo como a medida que pasa el tiempo, Ren y su maestro conviven a su manera y aprenden el uno del otro. Por un lado, Ren crece y se hace más fuerte; y por otro, Kumatetsu madura y deja de ser solitario.
Pero las cosas no terminan ahí, pues todo comienza a complicarse cuando Ren se convierte en adolescente y descubre la forma de entrar y salir del Reino de las bestias a su antojo.
Tras regresar al mundo de los humanos, Ren conoce a una chica tímida y muy inteligente llamada Kaede, quien lo ayuda a recuperar todos los años que este no asistió a la escuela; y también logra reencontrarse con su padre biológico.
Curiosamente, en el mundo de los humanos Ren es atraído por la historia de Moby-Dick y no tarda en comenzar a sentirse identificado con ella y a sentir un "oscuro vacío" en su interior; pero no será el único que llegue a sentir dicho vacío y terminará teniendo que enfrentarse a un enemigo algo inesperado.
La gran ballena
El niño y la bestia, fue escrita y dirigida por Mamoru Hosoda, quien anteriormente ha dirigido otras grandes películas como La chica que saltaba a través del tiempo (2006) y Wolf Children (2012).
No cabe duda que lo que más me sorprendió de esta película fue su guion. Me pareció increíble como cambió totalmente el tono del film, que al comienzo es muy cómico y ligero (cuando Ren es niño) en en algo más oscuro y metafórico (cuando es adolescente). Por otro lado, la analogía con Moby-Dick en el punto cumbre, me pareció una total genialidad.
Se puede decir que la animación también evoluciona de cierta manera a medida que avanza la historia, pues a mi parecer las escenas en las que Ren es niño cuentan con una estética más tosca que cuando es adolescente. Además, la batalla final posee unos efectos visuales bastante vistosos.
Finalmente, la música compuesta por Masakatsu Takagi, que incluye principalmente ritmos tradicionales japoneses, encajan a la perfección con cada una de las situaciones que vemos en pantalla.
Para mí, El niño y la bestia fue una grata sorpresa. Tan solo por su guion y mensaje, la recomiendo al 100%. Cabe mencionar que es apta para menores de edad, aunque cuenta con un par de escenas donde es recomendable la supervisión de un adulto.
1 comentarios :
voy a buscarla
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